No es extraño que siendo
Ginebra ciudad de relojeros, haya tantos relojes en la ciudad. Lo que sí llama la atención es que haya tantos de Sol.
Buena parte de ellos son verticales, como los que encontramos en la fachada del edificio del
Arsenal, frente al
Hôtel-de-ville y el de la iglesia de
Saint-Germain
En la fachada sur del
Hôtel-de-ville encontramos otros dos relojes verticales. Como la tabla no está exactamente orientada al sur, las líneas horarias vespertinas se encuentran más juntas que las matutinas ya que el reloj está orientado al sudoeste.:
Cerca de la
Place du Lac donde el lago
Léman da lugar al río
Ródano encontramos un interesante reloj de sol ecuatorial del año 1974. Este tipo de reloj de sol proyecta la sombra sobre una tabla horaria paralela al ecuador, dividida en 24 partes iguales correspondientes a las 24 horas del día.
En el
Quai Wilson, cerca del parque de la
Perle du Lac se encuentra una obra de la artista húngara
Klara Kuchta un reloj de sol horizontal de 6,40 metros de diámetro de acero inoxidable y cristal laminado. De noche una red de fibras ópticas iluminadas con láser encienden 198 estrellas sobre un mapa celeste. El reloj combina de esta manera la tradición ancestral de los relojes de Sol con la última tecnología.
En el jardín del
Museo de Historia de las Ciencias encontramos un globo gnomónico. Este tipo de reloj de Sol no es muy habitual, estuvo de moda en los siglos XVIII y XIX en los jardines y casas señoriales de los nobles. Presenta un eje inclinado paralelo al de la Tierra y para leer la hora hay que mover el arco que representa el meridiano y aplicar la corrección de la
ecuación de tiempo que aparece en la tabla correspondiente.
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2008-05-11, 22:47 | 6 comentarios